"Supongo que fui un niño feliz hasta que me di cuen­ta de que tenía que serlo. Hasta que vi cómo mi madre esta­ba pendiente del menor detalle de mi felicidad y me pareció que debía ser algo demasiado frágil si era preciso cuidarla de ese modo. Entonces me resultó mucho más difícil conservar un estado que corría —eso parecía decir mi madre, su actitud— el riesgo de romperse todo el tiempo.

¿Será que sólo nos importan las cosas que están siempre a punto de romperse?

No diga tonterías, periodista."

Martín Caparrós - Valfierno

Mirador Trafulero/ño

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